Te mirás en el espejo y no lo podés creer. ¡Otra vez no! Te salió un granito en el medio de la frente y aun no terminó de cicatrizar el que te salió en la pera la semana pasada. Llevás una dieta libre de grasas y frituras pero parece que no fue suficiente, y últimamente ya no sabés qué probar.
A no desesperar, siguiendo esta guía de consejos podés tener una piel libre de granitos y puntos negros o reducir considerablemente su cantidad.
¿Qué son y cómo se forman los granitos?
Los granitos son lesiones que se producen por una sobreproducción de sebo. Las glándulas sebáceas producen una sustancia llamada sebo que es indispensable para que nuestra piel se encuentre saludable. Cuando estas glándulas producen más cantidad de sebo que el necesario, obstruyen los poros formando los comedones o barritos.
¿Por qué a mí?
Lo primero que tenés que saber es que no sos la única que tiene granitos y puntos negros y que no estás sola. Sucede que el acné es una enfermedad que se debe a múltiples causas.
Algunas de ellas son:
- Cambios hormonales
- Genética
- Sobreproducción de sebo
- Estrés
Algunas sugerencias para evitar puntos negros y granitos
- Limpiá tu cutis por la mañana para eliminar células muertas y sudor, y por las noches para retirar el maquillaje y otros residuos que se hayan depositado a lo largo del día. La limpieza es el ABC para que tus poros no se obstruyan.
- ¡No te aprietes los granitos! Aunque parezca obvio, muchas personas piensan que deben retirar los granitos cuanto antes. Esto no solo que es falso sino que se corre el riesgo de infectar la lesión y que quede una cicatriz.
- Si tenés un cutis muy graso es aconsejable que recojas tu cabello antes de irte a dormir, así como que cambies las fundas de las almohadas cada dos o tres días para evitar que tu rostro se engrase aún más.
- Es muy importante que prestes atención a los componentes de las cremas y maquillajes y elijas aquellos que sean "oil free" (libre de aceite), así como aquellos productos que sean hipoalergénicos. Por otra parte, deberás usar maquillaje no comedogénico, que te ayudará a prevenir la aparición de futuros granitos.
Zonas de conflicto
Existen áreas del cuerpo que son más proclives a la aparición de granitos, denominadas zonas seborreicas. Las glándulas sebáceas de estas zonas tienden a producir más secreción de grasa. Dichas áreas son la nariz, la frente, la pera, el pecho y la espalda.
Ahora que conocés este dato es muy importante que prestes especial atención a la limpieza en dichas zonas para minimizar la aparición de granitos y puntos negros.
La clave está en la limpieza
Como te contábamos antes, los granitos se forman por la obstrucción de los poros, entonces la decisión más sabia es mantener una adecuada rutina de limpieza para minimizar la aparición de granos.
Si tu cutis es normal o seco, te recomendamos la Leche de Limpieza Activa Dermaglós, que limpia e hidrata la piel dejándola libre de impurezas. Aplicala por las mañanas y antes de irte a dormir con un suave masaje circular y retirala con un algodón. Luego, te aconsejamos el uso de un tónico descongestivo para descongestionar y tonificar la piel de tu rostro. El Tónico Hidratante Descongestivo Dermaglós es un excelente aliado para dejar tu piel suave y luminosa. Humedecé un algodón y aplicalo con un suave masaje circular por todo el rostro para finalizar la rutina de limpieza.
Si tu piel es mixta a grasa debés optar por geles que te ayuden a regular el brillo de tu cara y a eliminar el exceso de sebo. Es importante que repitas esta limpieza al menos dos veces al día: al levantarte y al irte a dormir. Si tu piel es muy oleosa, deberás consultar con tu médico si es conveniente realizar una tercera limpieza a media tarde. El Gel de Limpieza Purificante Dermaglós es una excelente opción para este tipo de pieles, ya que limpia en profundidad eliminando impurezas y controlando el exceso de grasitud. Aplicalo sobre tu mano previamente humedecida y distribuilo con masajes circulares por todo el cutis, enjuagalo con abundante agua tibia.
