El fototipo es la capacidad que tiene la piel de las personas para adaptarse al sol y asimilar las radiaciones solares. Está dado por una serie de características físicas (como el color de ojos, cabello y piel) y determina, por un lado, la capacidad de bronceado de la piel y, por el otro, el correcto factor de protección solar que cada uno debería utilizar.
Existen 6 fototipos y se clasifican de la siguiente forma:
Fototipo 1
Corresponde a las personas con piel muy blanca, ojos azules y pecas. Quienes tengan este fototipo deberían utilizar un FPS (factor de protección solar) 65, ya que por el tipo de piel requiere una protección muy alta.
Fototipo 2
Es el que tienen las personas de piel clara, ojos azules o claros, y pelo rubio o pelirrojo. Para ellos, el FPS indicado sería entre 45 y 35. Al exponerse al sol se les puede inflamar la piel, volverse colorada, y descamarse.
Fototipo 3
Las personas cuya piel es blanca, y sus ojos y pelo claros, poseen este fototipo. Deberían utilizar factor de protección solar entre 40 y 30 porque se queman fácilmente y tienen una ligera pigmentación.
Fototipo 4
Su piel, sus ojos y su pelo son marrones. Se quema moderadamente y se pigmenta con bastante facilidad. Para ellos el FPS debería ser entre 20 y 25.
Fototipo 5
Este fototipo corresponde a las personas con piel morena. Se pigmentan con facilidad y deberían utilizar un FPS 15.
Fototipo 6
Las personas con piel, ojos y pelo oscuro llevan este fototipo. Si bien el FPS que necesitan es moderado, también necesitan proteger su piel. Para ellos, lo indicado sería utilizar un FPS 8 o 10.
Luego de esta breve descripción, seguramente hayas encontrado tu fototipo y el de toda tu familia. Es importante que respetes el FPS indicado, ¡tanto para vos, como para los más chicos! De todas formas, ante cualquier duda siempre recordá consultar a tu médico.